Estás en los letreros de los cines y en la vidrieras
en los bancos de los parques sin pintar
y en la soledad de una gasolinera
en los arboles de toda esta ciudad...
Perdí tu figura por el miedo de seguirte
y vos, por ese miedo de dar un paso atras, voltear a mirarme...
tuviste miedo de quedarte con lo poco que era yo en ese momento
y yo, con el miedo de demostrarte que podía hacerte feliz...
Mierda! de que nos sirvió el miedo, tanto miedo....
Si ahora estás, donde nunca y donde siempre... en la sombra que apedreo
y en el llanto que ya no lloro, porque ahora
ahora soy mejor para ti
para mi...
Ahora soy lo que soñe... y vos...
Igual que antes, sólo un sueño para mí.